martes, 31 de mayo de 2016

Nadie te prepara psicológicamente para tu cambio de vida (I)

  
     A los 4 meses de tener el ictus ingresé en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo (el ictus me dio en Salamanca, pero como mi familia vive en Toledo, a los 2 meses me transladaron en UVI móvil al hospital de Toledo y de ahí, a los 4 meses, al hospital de parapléjicos ). Bueno pues, a los 5 meses tuve mi primera visita  a un psicólogo en un hospital especializado en lesionados medulares, no estaban especializados en daño cerebral; yo para entonces ya pensaba, mejor dicho, ya estaba totalmente segura de que en año y medio o 2 años como mucho, estaría recuperada. 

     La psicóloga de parapléjicos se centró en mi madre (probablemente la viera mucho peor que a mí), porque como yo estaba muy bien, ya que, tenía pleno convencimiento de que era algo temporal.

Me llama poderosamente la atención que cuando hay accidentes masivos, acudan grupos de psicólogos; ni muchísimo menos digo que ellos no lo necesiten, digo que a mi familia y a mí, la vida nos cambió radicalmente y nadie nos preparó para enfrentar nuestra nueva vida; a mi madre le dijeron que yo no volvería a andar, pero no se atrevió a decírmelo; yo viví alrededor de 3-4 años en las nubes, y cuando me di cuenta de que no volvería a andar, caí en una profunda depresión. 


viernes, 13 de mayo de 2016

Mi historia

     
     Estaba estudiando y trabajando en Salamanca y en noviembre de 2003, a la edad de 28 años, me dio un infarto cerebral.
Hasta ahí bien; bueno bien..., son cosas que pasan en la vida y que no te queda más remedio que aceptarlas. Que bien lo he afrontado, ¿verdad?¡qué madurez !¡cuánto aplomo! HOSTIAS; esto lo digo 12 años y medio después, pero no ha sido fácil, NADA FÁCIL.

     Estuve un mes en coma, me desperté sin poder casi moverme (sólo movía los párpados y las cejas), sin poder hablar y pensando que estaba soñando; tenía una sonda urinaria, una sonda naso-gástrica y una traqueotomía.




      A pesar de haber despertado ya del coma,  hasta febrero no tuve mucha consciencia de lo que me pasaba; por esa fecha ya había recuperado un poquito de movilidad, podía mover el cuello para decir si y no con la cabeza y podía abrir limitadamente la boca.
     
     Han pasado 12 años y medio; respiro por mi misma, como y orino voluntariamente. He recuperado casi toda la movilidad del cuello, muevo (de aquella manera) algunos músculos de la cara y tengo cierta movilidad en la la mano izquierda, algo más en la derecha, lo mismo en los dos brazos(muevo algo los brazos hasta los codos, pero de los codos a los hombros parece q mis brazos están pegados a mi cuerpo con pegamento fuerte), suficiente como para conducir mi silla de ruedas eléctrica, para manejar muy lentamente el pc mediante el ratón y el movil con mucha dificultad.